El DRYSUIT te mantiene caliente, seco y cómodo bajo el agua, pero también es una inversión importante: los modelos más económicos cuestan más de 1.000 ¤. Los trajes secos también requieren un mantenimiento periódico, que también es caro. Cambiar una junta del cuello puede costar $100, una válvula $125, una cremallera impermeable entre $300 y $500. Por supuesto, un traje seco de calidad puede durarte 10 años o incluso mucho más, si lo tratas bien.
**Antes de la inmersión**
Cuide su traje seco cuando lo esté utilizando. Los componentes más críticos de un traje seco -las juntas y la cremallera- son los más susceptibles de sufrir daños al ponerse y quitarse el traje.
1. Tirando de los precintos de muñeca y cuello, especialmente las de látex, sobre las manos y la cabeza sin espolvorearlas antes con polvos de talco es una fórmula infalible para arruinar la inmersión y pagar una factura de reparación considerable. Los polvos de talco eliminan prácticamente toda resistencia entre la piel y los sellos, permitiendo que se deslicen sin forzar la goma. De hecho, cuando se pone el traje, nunca debe estirar el material a lo largo y pasarlo por encima de la cabeza o la muñeca. Debe estirar la abertura todo lo posible y pasar la cabeza y las muñecas a través de los sellos.
2. Nunca cierre una cremallera impermeable sin aplicar antes un poco de cera para cremalleras. Utilice sólo la cera del fabricante que esté específicamente formulada para la cremallera de su traje. Aplique la cera sólo en la parte exterior de los dientes para no interferir con las superficies de sellado interiores de la cremallera. Si tu traje tiene un diseño de entrada trasera y necesitas ayuda para subir la cremallera, asegúrate de que tu compañero sabe lo que hace. Las cremalleras de los trajes secos son resistentes, pero no indestructibles. No tires nunca; en lugar de eso, estira el carril de la cremallera lo más recto posible y tira lenta y constantemente del carro de la cremallera mientras mantienes el carril alejado de la ropa interior para que nada se atasque en los dientes.
3. Una vez que te hayas subido la cremallera, ponte en cuclillas y tire del sello del cuello para purgar el aire del traje. O, si es posible, baje por el escalón de natación y deje que la presión del agua haga la purga por usted. Este segundo método tiene un doble propósito: neutraliza cualquier sobrecalentamiento que pueda haber generado hasta este punto, lo que hace que ponerse el resto del equipo de buceo sea mucho más cómodo. En cualquier caso, si saca ahora todo el aire posible del traje seco, reducirá la posibilidad de que se rompa el sello del cuello durante la entrada a paso de gigante.
4. Recuerda, cada vez que te pongas o te quites un traje seco estás forzando las juntas y la cremallera, y acercándote un paso más a una costosa reparación. Pide tu traje con cremallera de alivio o, mejor aún, con válvula de orina, para no tener que desabrocharte la cremallera y desnudarte cada vez que tengas que orinar.
5. Un precinto roto no sólo cuesta tiempo y dinero para reparar, arruina un día de buceo, y eso tampoco es barato. Si equipa (o reequipa) su traje seco con un sistema de sustitución de juntas sobre el terreno, como ZipSeals de DUI o Seal System de Waterproof, nunca perderá un día de inmersión por culpa de una junta rota. Si falla una junta de la muñeca o del cuello, basta con quitársela, colocar una de repuesto y continuar con la inmersión.
Después de la inmersión. . .
6. Cuando salgas del agua, aprieta unas cuantas ráfagas de aire en el traje antes de abrir la manguera QD. Esto hace que resulte más cómodo caminar por cubierta con la cremallera puesta. Si es posible, enjuague inmediatamente el traje con agua dulce, incluidas las juntas y las carcasas de las válvulas.
7. Si es un traje de tela, limpie el exterior Si se trata de un traje de neopreno, basta con acolcharlo ligeramente, tapar la válvula, abrir la cremallera y salir. Si se trata de un traje de neopreno, basta con acolcharlo ligeramente, tapar la válvula, abrir la cremallera y salir.
8. Si vas a volver a bucear en las siguientes 24 a 48 horas, cuelgue el traje del revés para secar la humedad que se produce por la transpiración típica. No aclare el interior porque no se secará a tiempo para su próxima inmersión. Sin embargo, si va a bucear durante un par de semanas o más, enjuague el interior. Esto es fácil de hacer en trajes secos equipados con calcetines blandos que se pueden volver completamente del revés. Los trajes con botas incorporadas pueden resultar difíciles, pero déles la vuelta todo lo que pueda, teniendo en cuenta que el interior de las botas tardará más en secarse por completo, pero debe estar completamente seco antes de guardar el traje.
9. Cuelgue el traje en un lugar fresco y seco fuera del sol, preferiblemente en una percha para trajes secos (de alta resistencia con soportes anchos para los hombros). Cada día, gire el traje de fuera a dentro, luego de dentro a fuera, luego de fuera a dentro, etc. hasta que esté completamente seco. Los trajes de tela se secan relativamente rápido, un traje de neopreno puede tardar un par de días por cada lado. Las perchas especiales y los ventiladores eléctricos de las secadoras de trajes secos pueden ayudar a acelerar esta fase de secado.
10. Cuando el traje esté seco, tiéndelo sobre una mesa. Espolvorea los cierres de las muñecas y del cuello con polvos de talco para que la goma no se aplaste y se pegue a sí misma cuando esté guardada. Utiliza un cepillo de dientes muy suave para eliminar la arenilla y la suciedad de los dientes de la cremallera. Encera también los dientes exteriores de la cremallera. Es importante dejar la cremallera abierta para no deformar las superficies de sellado.
11. Enrolla el traje desde las botas hasta el cuello, teniendo cuidado de que la cremallera abierta mantenga su forma más natural. A continuación, introduzca el traje en una bolsa seca hermética que lo protegerá de la humedad y el ozono. Nota: No cuelgue un traje seco para almacenarlo durante mucho tiempo. Aunque se utilice una percha de plástico de hombros anchos, con el tiempo el peso del traje ejerce mucha tensión sobre los hombros, además de quedar expuesto a la suciedad, el polvo y el ozono.
12. Guarda la bolsa al abrigo del sol lejos de gases de escape de automóviles, cuadros eléctricos y equipos eléctricos como lavadoras o secadoras. Nunca apile el equipo encima del traje seco; se trata de su equipo más valioso, su inversión a largo plazo, siempre va encima, listo para su próxima aventura de buceo en seco sin problemas.
13. Realice una inspección anual y una prueba de presión. De $50 a $79, puede descubrir problemas menores antes de que arruinen una inmersión.
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